El 12,4% de inflación de agosto estuvo fuera de los pronósticos de quienes negociaron paritarias antes de la devaluación de 22 puntos, que en cuestión de horas castigó el poder adquisitivo, sobre todo de los asalariados. En la provincia, la política salarial se había cerrado una semana antes de que se anunciara esa medida del gobierno nacional. Por lo tanto, su impacto no fue contemplado. Santa Fe tampoco pagó – como la mayoría de las provincias- el bono que propuso el ministro de Economía, Sergio Massa, para mitigar los efectos post devaluatorios. ¿Cómo quedan, entonces, los salarios estatales frente al índice más alto de inflación de los últimos 32 años?
Consultado por El Litoral, el ministro de Trabajo, Juan Pusineri, aseguró que pese al indicador, los salarios en Santa Fe "estarán preservados" y no quedarán debajo de la inflación.
"Se garantiza el poder adquisitivo para los trabajadores, y un esquema ordenado para que la próxima gestión convoque la paritaria con tiempo y con un análisis suficiente", dijo Juan Manuel Pusineri. Crédito: Mauricio Garin.
"Se garantiza el poder adquisitivo para los trabajadores, y un esquema ordenado para que la próxima gestión convoque la paritaria con tiempo y con un análisis suficiente", dijo Juan Manuel Pusineri. Crédito: Mauricio Garin.
"La política acordada en agosto tiene dos características: preserva el poder adquisitivo del salario, toda vez que cuando operan las cláusulas de revisión automática permiten que el salario no quede debajo de la inflación; y por otro lado – explicó-, la forma en que fueron dispuestas estas cláusulas de actualización en octubre y diciembre, permiten tener un esquema ordenado para la próxima gestión porque va a terminar el periodo de diciembre con un cierre actualizado y un lapso adecuado para que la nueva administración pueda tener una convocatoria (a paritarias) sin sobresaltos. En síntesis – sostuvo-, se garantiza el poder adquisitivo para los trabajadores, y un esquema ordenado para que la próxima gestión convoque la paritaria con tiempo y con un análisis suficiente, porque no va a estar urgida de hacer intervenciones sobre fin de año o en el mismo mes de diciembre", planteó.
– ¿No se ve afectado el poder adquisitivo, siendo que el 25% de aumento de marzo se planteó para compensar también el desfasaje de los meses anteriores y ahora se termina el período con una inflación del 12,4%?
– Cuando nosotros empezamos la negociación salarial, el número que se manejaba como aumento para agosto era del 20%. Y eso lo habían dicho hasta públicamente algunos dirigentes sindicales. Frente a la posibilidad de una inflación más alta se terminó acordando un 25%. Ese valor va a cubrir el objetivo de tener cubierta la inflación de julio y agosto, y después tenemos aumentos en septiembre y octubre. Es decir que el mes que viene ya se aplica la cláusula de revisión automática. Por lo tanto, aún cuando la inflación sea muy alta, va a haber resguardo. Lógicamente, las conversaciones con los gremios están abiertas. Tenemos un intercambio frecuente, yo diría casi semanal. Y vamos a ir monitoreando la situación. Lógicamente, vamos a incorporar el dato del IPC provincial, que es el que incide en toda discusión paritaria.
– ¿Ese monitoreo y diálogo permanente significa que la paritaria pueda reabrirse?
– Yo creo que están dados los resguardos suficientes como para que se pueda transitar esta última parte del año con tranquilidad en cuanto a que no se va a perder contra la inflación. Esas cláusulas van a operar como un sostén de garantías aun cuando la inflación sea elevada. El diálogo y el intercambio lo vamos a tener también. Pero no queremos en esta instancia comprometer (a la futura gestión) con una inversión que es la más importante que tiene la provincia y que es en materia de salario público. No queremos tampoco comprometer la situación de la próxima gestión con cuestiones que no sean suficientemente acordadas, conversadas y puestas sobre la mesa.
Fuente: El Litoral