Suba del gasto y baja de recaudación son títulos de los datos fiscales nacionales de mayo. Pueden parecer alarmas en una economía que ralentiza su recuperación; sin embargo el panorama financiero no altera, al menos por el momento, el temperamento de la administración nacional.
«En los primeros cinco meses del año, el gasto primario nacional tuvo una suba interanual real del 5,6%, con 11 gastos subiendo y 5 gastos bajando», analizó Nadin Argañaraz. El titular del Instituto Argentino de Análisis Fiscal reseñó que incluso el gasto en jubilaciones y pensiones (sin bono) creció un 28% real interanual.
«Se aprecia que 11 de los 16 componentes del gasto tuvieron incrementos interanuales en términos reales. Los gastos que más subieron fueron: el gasto en transferencias de capital a provincias (+177%), transferencias corrientes a provincias (+131%) y asignación universal para la protección social (+41%).
«Por otro lado, los gastos que más cayeron fueron: subsidios a la energía (-65,4%), subsidios a otras funciones (56,5%) y programas sociales (-31,8%)», señaló el especialista.
Un freno en mayo
Si se consideran sólo los números de mayo, sin embargo, el gasto primario nacional «tuvo una baja real interanual del 2%, con 9 gastos subiendo y 7 gastos bajando». Iaraf señala que en el mes, 9 de los 16 componentes del gasto tuvieron incrementos interanuales en términos reales.
«Los que más subieron fueron transferencias de capital a provincias (+194%), transferencias corrientes a provincias (+108%) y otros gastos corrientes (+85%). Resulta importante destacar el incremento del 16% del gasto en jubilaciones y pensiones contributivas, que participa en el 40% del gasto primario».
Por el lado de las erogaciones que menos más cayeron, el equipo de Argañaraz apunta a subsidios a otras funciones (-66%), subsidios a la energía (-64,5%) e inversión real directa (-40,5%).
Retroceso en la recaudación
«La variación interanual en los ingresos tributarios en mayo se vio afectada por la alta base de comparación del Impuesto a las Ganancias, dados los resultados extraordinarios registrados por el sector financiero durante el ejercicio fiscal 2023», posteó en las primeras horas del miércoles el ministro Luis Caputo.
Argañaraz le puso números a la situación: «los ingresos totales tuvieron una variación real interanual negativa de 14%. Esto obedece a que los ingresos tributarios cayeron en términos reales un 14,5% (caída de ganancias de 44%) interanual y al descenso de los ingresos no tributarios de 6% real interanual.
«Es importante referenciar que en los primeros 5 meses de 2024, el impuesto PAIS había recaudado $4,7 billones en moneda constante. Esta situación de mayo hizo que de un excedente acumulado de ingresos de $543.800 millones a abril, en moneda de mayo de 2025, se pase a una caída de ingresos de $1.288.000 millones al considerar los primeros cinco meses del año».
Baja de impuestos
Para explicar todo el cuadro hay que volver al argumento del ministro: hubo una «baja o eliminación de impuestos por el equivalente a más de 2 puntos del PBI, como el Impuesto PAIS en diciembre de 2024, los derechos de exportación para economías regionales y la baja transitoria para exportadores que cumplan con el plazo establecido para la liquidación de divisas, conforme lo estipulado por el Decreto 38/2025.
«También -añadió- la derogación a partir de marzo de 2025 de la suspensión de los certificados de exclusión, lo que incidió negativamente en la recaudación de las percepciones aduaneras en IVA y Ganancias y la reducción de aranceles de importación e impuestos internos para distintos productos tecnológicos y electrónicos desde el 20 de mayo«.
Superávit primario del 0,9% del PBI
El superávit primario acumulado a mayo de 2025 fue de 0,9% del PBI y el fiscal de 0,3% del PBI anual. Los intereses pagados(deuda) equivalieron a 0,6% del PBI. El saldo «refleja el compromiso del Ministerio de Economía con el ancla fiscal, pilar fundamental del programa económico implementado a partir de diciembre de 2023», ponderó Caputo.
«En el mes se registraron pagos de intereses netos de tenencias intra sector público por $1.034.795 millones. Este superávit acumulado permitirá solventar los meses de déficit estacional (Julio y Diciembre fundamentalmente)», señaló el ministro de Economía.
La meta fiscal comprometida para todo el año con el FMI es un superávit primario del 1,3% del PBI, pero incluso la administración Milei elevó unilateralmente ese objetivo para fijarlo en 1,6%. Cabe recordar que la misión del organismo para revisar las cuentas argentinas se pospuso para fines de julio, en coordinación con la estrategia del equipo económico para acumular las reservas comprometidas.
