Mientras Palmeiras llega como el mejor de la fase de grupos de la Copa Libertadores, su entrenador vive días agitados: ausente en los entrenamientos por un viaje a Portugal, señalado por la hinchada y con versiones sobre una posible partida.
Palmeiras cerró la fase de grupos con una campaña impecable: seis triunfos, puntaje ideal, 18 goles a favor y apenas cuatro en contra. Un andar demoledor que contrasta con la sufrida clasificación de River, que necesitó de la enorme figura de Franco Armani en los penales para seguir adelante. Sin embargo, más allá de los números, el presente del equipo paulista está atravesado por tensiones internas que involucran directamente a Abel Ferreira.
El entrenador portugués viajó a su país para resolver cuestiones personales y esa ausencia, en plena preparación para la serie de cuartos frente al “Millonario”, generó un fuerte malestar entre los torcedores. El empate sin brillo ante Corinthians por el Brasileirao no ayudó a calmar las aguas y, durante la fecha FIFA, el “Verdao” entrena sin su conductor, cuyo regreso aún no fue confirmado oficialmente por el club.
La relación con los hinchas viene desgastada: a Ferreira ya lo apuntan por un funcionamiento que no convence, pese a la inversión en refuerzos, y fue blanco de insultos tras la eliminación en la Copa de Brasil.
Con contrato vigente hasta diciembre, la dirigencia pretende renovarle hasta 2027, pero el técnico —bicampeón de la Libertadores en 2020 y 2021— todavía no dio una respuesta y, según versiones, habría recibido sondeos tanto de Asia como de Europa.
En ese contexto, surgió el nombre de Artur Jorge como eventual reemplazante, aunque desde el entorno de Ferreira despejaron dudas de cara a corto plazo. «Quien quiera que venga, no va a salir en medio de la temporada», aseguró Hugo Cajuda, su representante, en diálogo con ESPN Brasil.
De esta manera, todo indica que Abel estará en el banco cuando Palmeiras se mida con River. Será un nuevo duelo con Marcelo Gallardo, técnico al que el luso siempre destacó públicamente. Aunque en San Pablo nadie se atreve a afirmar qué destino tendrá su futuro, el choque con el Millonario llega en un momento de máxima tensión para el Verdao y su entrenador.
Se desató la interna entre la presidenta del Palmeiras y el DT Abel Ferreira por el mercado de pases
A tres semanas del cruce de ida frente a River por los cuartos de final de la Copa Libertadores, Palmeiras sufre de una crisis interna entre su entrenador y su presidenta.
Abel Ferreira se mostró molesto en conferencia de prensa tras igualar con Corinthians y apuntó a la falta de un delantero en el banco de suplentes, situación que molestó a Leila Pereira, presidenta del “Verdao” que desembolsó €100 millones en el último mercado de pases.
Según señalan los medios de Brasil, la máxima funcionaria está molesta por la situación, ya que hizo todo el esfuerzo en el último mercado, explicando que se trajo todo lo que el DT pidió y hasta le tiró la pelota: “Cambió el sistema con el mercado cerrado”, por lo que Palmeiras no sumó otro atacante.
Luego del Mundial de Clubes y la venta de Estevao Willian, el equipo de Paulista no logró sumar la potencia ofensiva necesaria, Ferreira cambió el esquema para intentar reemplazarlo.
Las incorporaciones de Palmeiras en el último mercado de pases
- Carlos Miguel: €6 millones
- Khellven: €5 millones
- Micael: €4,8 millones
- Jefté: €6 millones
- Facundo Torres: €12 millones
- Emiliano Martínez: €7,15 millones
- Lucas Evangelista: €4 millones
- Andreas Pereira: €10 millones
- Ramón Sosa: €12,5 millones
- Paulinho: €18 millones
- Vitor Roque: €25,5 millones
Fuente Doble Amarilla
