El trabajo de Gustavo Costas en Racing es motivo de elogio constante, porque terminó de armar un equipo competitivo, copero y ganador. No solo eso, sino que el DT logra transmitir al hincha toda la pasión por su trabajo y por lo que siente por La Academia. En ese sentido, recibió un mimo nada menos que de Ricardo Bochini, leyenda de Independiente: «Es fanático, me gusta que sea así«.
«Lo respeto mucho ¿cómo no lo voy a respetar? Creo que todos los que sienten al club tienen que ser así. Si yo estuviese en Independiente, haría lo mismo«, señaló el Bocha, en una charla para ESPN F10. Al entrenador lo caracteriza mucho la intensidad con la que vive cada encuentro y la locura que se desata cuando tiene que gritar un gol de su equipo.
En la mayoría de los partidos definitorios que jugó Racing bajo el mandato de Costas, se lo pudo ver gritando y corriendo por toda la cancha junto a sus colaboradores y abrazándo a sus futbolistas. Sin embargo, a veces esa pasión le ha jugado en contra, como aquel recordado duelo frente a Barracas Central en el primer partido del Torneo Clausura, en el que el equipo llegó a la final pero cayó con Estudiantes.
«Es difícil. Yo no duermo. Dormí apenas una hora con el partido de ayer, me levanté a las seis de la mañana para ir a entrenar y me vi diez partidos de Cruzeiro. Yo estoy contento, a mí me encanta vivirlo así este momento de Racing porque como hincha me tuve que comer todo«, dijo Costas antes de la final de la Copa Sudamericana del año pasado, que le terminaron ganando 3-1 a Cruzeiro en Paraguay. Un loco lindo.
