Lo buscaron a Crespo y les dijo que no, porque espera algo de afuera. Le ofrecieron el puesto a Luis Zubeldía y les dijo que no por un problema familiar: se va a vivir a La Pampa y por ahora no va a dirigir. Lo hablaron al "Gringo" Heinze y no contestó: es otro que espera algo importante de afuera. Cuando pensaron en Jorge Almirón, ya le había dado el sí a Lanús: volvió a su casa. Nunca convencidos del tema Mohamed, los dirigentes sabaleros quedaron atrapados dentro de su propio laberinto. Sin dudas, vivir sin Eduardo Domínguez se hace mucho más complicado de lo que se pensaba.
Camino a firmar con el Inter de Porto Alegre, el "Cacique" Alexander Medina tuvo algún corto-circuito que puso en duda su arreglo en Brasil: ahí Colón estaba dispuesto a hacer el gran esfuerzo por el ex entrenador de Talleres de Córdoba, que finalmente se fue al club rojo. Es decir, no hay problema de dinero si el nombre es importante y genera esa imagen de certeza que transmite, por ejemplo, Alexander Medina o el "Gringo" Heinze.
Al mismo tiempo que el propio Eduardo Rodrigo Domínguez junto a Juan Luis Berros (su representante, el mismo de Gallardo) se daban la mano por última vez con los dirigentes sabaleros en Santa Fe, Colón decidió entrar en un impasse para designar a su sucesor. Si bien la charla con Leandro Somoza y todo su cuerpo técnico fue muy positiva (estuvo el propio Vignatti), hubo cuestiones que no terminaron de cerrar por ahora.
Apareció en escena el uruguayo Paulo Pezzolano, 38 años, ex DT de Pachuca y con muy buenas referencias. Durante más de 30 minutos y desde Montevideo, Pezzolano habló con los dirigentes de Colón. En su primer año como director técnico del City Torke, ganó 16 partidos, empató ocho y perdió solo cuatro, con un rendimiento sorprendente del 66,66 por ciento. En su segunda incursión como entrenador, dirigió al Liverpool, de Uruguay, club con el que ganó 31 partidos, empató 23 y perdió 21, con un rendimiento del 51,55 por ciento. Ya en el Pachuca, en México, Pezzolano dirigió 73 partidos, de los cuales ganó 24, empató 24 y perdió 25, con un rendimiento del 43,84 por ciento.
Camino a la elección final del sucesor del "Barba" aparecen nombres de todo tipo y color en los celulares de los dirigentes de Colón. Lo que es realmente insólito es la frase más escuchada: "Tenemos dinero para traer un entrenador importante y no hay ninguno disponible para lo que hoy necesita Colón, después de salir campeón y con la llave de la Copa Libertadores 2022 en la mano".
Con las palabras "impasse" y "freno de mano" instaladas en la mesa chica de Colón (Vignatti, Darrás, Alonso, Fleming, Ingaramo, Saliva), todo parece indicar que los sabaleros despedirán el mejor año de la historia sin tener DT. A esta altura, el nuevo técnico de Colón vendrá con el nuevo año. No queda otra.