"Mejor que decir es hacer", reza un viejo dicho. Entonces, tomando esta frase no hay dudas que Paolo Goltz fue uno de los primeros soldados de trinchera que se puso a disposición de Colón para ayudar al rápido regreso a Primera División.
El entrerriano es uno de los pocos sobrevivientes del último plantel y con su jerarquía en este recorrido inicial demostró en Primera Nacional que es uno de los insustituibles en defensa.
Lamentablemente las últimas horas familiares no fueron las mejores para Goltz, a raíz del deceso de su señora suegra, motivo por el cual se reincorporará este jueves a los entrenamientos, pensando en el viaje a Santiago del Estero.
Uno de los referentes del equipo de Iván Delfino tuvo activa participación el pasado domingo contra Aldosivi. Completó un despeje, más un tiro bloqueado, con un alto porcentaje (92%) al momento de entregar con buen destino el balón.
Asimismo, ganó cuatro de los seis duelos aéreos entablados, mientras que de los diez duelos disputados por el suelo se impuso en cuatro. Para completar los números interesantes, solamente una vez lo gambetearon, con ese infortunio del remate desviado que pegó en su brazo y fue sancionado con penal por Lobo Medina para darle el empate al Tiburón.
Fuente: UNO
