El elenco catalán quiere liquidar el campeonato, mientras que el conjunto merengue intentará dejar la definición al rojo vivo.
Barcelona y Real Madrid protagonizarán una nueva edición del clásico español este domingo, desde las 11:15 (hora argentina), en el Estadio Olímpico Lluís Companys, por la 35ª fecha de LaLiga, en un duelo que podría definir el rumbo del campeonato.
El Barça busca sentenciar el título
El equipo dirigido por Hansi Flick llega como líder del torneo, con cuatro puntos de ventaja sobre su eterno rival. Con solo una derrota en todo 2025 en el ámbito local, el "Barça" intentará dar el golpe definitivo en la recta final de la temporada.
En la última fecha, superó con lo justo a Valladolid por 2-1, con goles de Raphinha y Fermín López, y para este encuentro recupera a Robert Lewandowski, además de Alejandro Balde y Marc Casadó, quienes irían al banco.
El Real, con bajas pero con esperanza
El conjunto de Carlo Ancelotti viene de vencer 3-2 a Celta, aunque terminó sufriendo tras haber estado 3-0 arriba. Llega con muchas bajas defensivas: no estarán Militao, Carvajal, Alaba, Mendy, Camavinga ni Rüdiger, lo que obligará al técnico a rearmar su última línea.
Aun así, el "Merengue" confía en su capacidad para dar el golpe, como ya lo hizo en la final de Copa.
Dominio blaugrana en la temporada
En lo que va del 2025, Barcelona se impuso en los tres clásicos disputados: ganó 4-0 en el Bernabéu por LaLiga, 5-2 en la Supercopa de España en Yeda y 3-2 en la final de la Copa del Rey, con un gol decisivo de Jules Koundé en el alargue.
Formaciones probables
Barcelona: Wojciech Szczesny; Eric García, Pau Cubarsí, Íñigo Martínez, Gerard Martín; Frenkie de Jong, Pedri, Dani Olmo; Raphinha, Lamine Yamal y Ferran Torres. DT: Hansi Flick.
Real Madrid: Thibaut Courtois; Federico Valverde, Raúl Asencio, Aurélien Tchouameni, Fran García; Luka Modric, Dani Ceballos, Jude Bellingham; Arda Güler, Vinicius Juniors y Kylian Mbappé. DT: Carlo Ancelotti.
El árbitro del encuentro será Alejandro Hernández, en un choque que promete emociones fuertes y puede marcar el destino del campeonato.
