El triunfo como visitante ante Boca le sirvió a Unión como inyección anímica pensando en el duelo de ida ante Nacional por los octavos de final de la Copa Sudamericana. Si bien es cierto que se apeló a una formación alternativa en el inicio, luego ingresaron algunos titulares y la base se solidificó. Quizás no fue la mejor función, pero el equipo fue práctico y volvió a ganar fuera de Santa Fe, que el gran déficit en la campaña anterior. Ahora el grupo quedó a la espera del viaje a Uruguay.
El plantel se quedó en Buenos Aires en una logística que ya había sido planificada, aunque con la ausencia del DT Gustavo Munúa, que cursa sus últimas horas de aislamiento tras haber dado positivo de coronavirus.
El grupo tomará un vuelo chárter este domingo por la tarde hacia Montevideo, donde se alojará en un hotel de una importante cadena internacional.
Si todo sale bien, el entrenador se sumaría el lunes, trasladándose vía terrestre, siempre y cuando dé negativo en el test. Lo bueno es que está bien de salud y metido de lleno en la planificación, con su ayudante Christian Berman al frente del equipo en estas horas.
Unión hará un trabajo este lunes en el vecino país, para luego quedar listo para el duelo ante Nacional del martes, desde las 19.15, con arbitraje del chileno Cristian Garay. Vale recordar que habrá un buen acompañamiento de hinchas, que agotaron las 2.000 entradas en menos de 40 minutos. Una expectativa muy grande por seguir al equipo en una instancia histórica, para luego tratar de liquidar la serie en Santa Fe.
