Busca reformar el sistema de gobernanza del organismo científico para orientar las investigaciones según sus prioridades, pero aún no hay fecha para su publicación oficial
El Gobierno nacional trabaja en la redacción de un decreto que le permitirá intervenir en las decisiones del Conicet, el principal organismo científico del país. La iniciativa apunta a que el Ejecutivo pueda definir el rumbo de las investigaciones que actualmente abarcan disciplinas como ciencias agrarias, exactas, naturales, sociales, ingeniería y salud, entre otras.
Desde la Casa Rosada señalan que el objetivo es «poder decidir qué se investiga y qué no», con el argumento de priorizar proyectos técnicos frente a estudios que consideran poco relevantes. «Queremos priorizar lo técnico por sobre informes que hablan de Batman«, remarcan, en referencia a críticas previas hacia algunas investigaciones sociales.
La medida, que aún no tiene fecha confirmada de publicación en el Boletín Oficial, ya fue revisada por los equipos técnicos del Ministerio de Desregulación y Transformación del Estado, liderado por Federico Sturzenegger, y por la Secretaría de Legal y Técnica, a cargo de María Ibarzabal. Dentro del oficialismo hay distintas posturas: mientras algunos aseguran que el decreto cuenta con el visto bueno del presidente Javier Milei, otros admiten que podría demorarse.
En paralelo, el Ejecutivo ya tiene listo otro decreto para reorganizar la Agencia Nacional de Promoción de la Investigación, el Desarrollo Tecnológico y la Innovación (I+D+I), el organismo que financia los proyectos de investigación. El nuevo directorio pasará de once a tres integrantes, quienes serán designados en los próximos días.
La Agencia I+D+I, que depende de la Secretaría de Innovación, Ciencia y Tecnología, administra fondos como el FONCyT, el FONTAR y el FONARSEC, cuenta con 165 empleados y un presupuesto de 25.000 millones de pesos.
En tanto, el Conicet tiene una estructura mucho más amplia, con 26.781 trabajadores, entre ellos 11.800 investigadores, 10.300 becarios, 2.800 técnicos y 1.400 administrativos, y un presupuesto que ronda los 580.000 millones de pesos. El organismo gestiona 17 Centros Científico Tecnológicos (CCT), 7 Centros de Investigaciones y Transferencia (CIT), un Centro Multidisciplinario y más de 300 institutos en todo el país.
El organismo está dirigido por un directorio de ocho miembros y un presidente, actualmente Daniel Salamone, designado por el Ejecutivo. Los integrantes del directorio provienen de ternas propuestas por investigadores, universidades, sectores productivos, industriales y gubernamentales provinciales, con mandatos de cuatro años renovables parcialmente cada dos.
Aunque por ahora el Gobierno postergó una reforma estructural más profunda del Conicet -que incluiría recortes en distintos departamentos-, tiene previsto modificar el régimen de ingresos: la idea es limitar el acceso a los investigadores en ciencias sociales y humanidades y priorizar perfiles técnicos vinculados a sectores estratégicos como la energía, la minería y la salud.