El escándalo por el fentanilo adulterado, que provocó 96 muertes en el conurbano bonaerense, sumó un giro clave: José Antonio Maiorano, director técnico del laboratorio HLB Pharma, pidió ampliar su declaración indagatoria y rompió el silencio ante el juez federal Ernesto Kreplak.
La audiencia se realizó este miércoles, y aunque el contenido de su testimonio se mantiene en reserva, marca el cierre de la ronda de declaraciones. Ahora, Kreplak deberá decidir en las próximas horas si procesa a los 17 imputados en la causa, entre ellos Ariel García Furfaro, dueño del laboratorio Ramallo, acusado de fabricar el lote contaminado.
l expediente también apunta a graves fallas en los controles internos y en organismos como ANMAT e INAME, donde se detectaron alertas ignoradas. Ya hubo allanamientos y desplazamientos de funcionarios.
El caso podría derivar en penas de hasta 25 años de prisión para los principales responsables.