Axel Kicillof volvió a apuntar contra Javier Milei por la falta de recursos en Buenos Aires y pidió que la Legislatura apruebe la Ley de Financiamiento. Aseguró que la Provincia atraviesa “un asedio financiero ilegal”, denunció el recorte de transferencias obligatorias y advirtió que no afrontará vencimientos de deuda “a costa de salud o educación”.
El gobernador afirmó que la Nación retuvo fondos vinculados a seguridad, transporte y jubilaciones, y sostuvo que la deuda nacional con Buenos Aires equivale a “billones de pesos”. También reclamó que el Gobierno los excluyó de reuniones clave.
Frente a intendentes y funcionarios, repasó el impacto económico: caída de actividad en la Provincia, freno de obra pública y disminución de recursos que, según su cálculo, supera los $12,9 billones. Defendió la gestión provincial como “austera” y remarcó la inequidad en la coparticipación.
De cara a la sesión en la que se debatirá el endeudamiento, Kicillof aclaró que el pedido “no aumenta el stock de deuda”, sino que busca cubrir vencimientos ya previstos. El proyecto destina un 8% del financiamiento a los municipios y garantiza fondos fijos hasta junio.
Cerró con un mensaje a la oposición: pidió acompañar la iniciativa “en favor de los 17 millones de bonaerenses”.







