El presidente de la empresa estatal OSE pudo dar una noticia que se esperaba desde hacía más de un mes: las reservas de Paso Severino, principal fuente de agua para abastecer a Montevideo y el área metropolitana, subieron.
Ayer también bajaron los niveles de sodio y cloruros respecto a los del miércoles. En las tres líneas de bombeo se ubicó por debajo del límite de 440 miligramos por litro (mg/l) y de cloruros (720 mg/l).
El volumen de precipitaciones de entre el martes por la noche y el jueves a la mañana duplicó a toda la lluvia caída en junio, explicó el presidente de OSE en su reporte. Paso Severino acumuló 20,7 mm y el río Santa Lucía llegó a 28,5 mm.
Estos valores si bien son bienvenidos siguen siendo insuficientes. "En el mes necesitaríamos que llueva en el entorno de los 80 a 90 milímetros que es la estadística meteorológica, o lo normal que debería de llover en esta época del año, teniendo en cuenta también que la época de invierno es donde menos llueve, a lo contrario de lo que se piensa. Pero si llegáramos a ese valor acumulado de 80 o 90 milímetros en todo el mes, ahí serían valores normales para la época del año", explicó la directora de Servicios Meteorológicos del Inumet, Natali Bentancor.
Ayer más temprano Montero expuso, durante un evento en el Instituto Manuel Oribe del Partido Nacional, sobre el proyecto Arazatí, también conocido como Neptuno, cuyo objetivo es construir una planta potabilizadora con financiamiento privado.
En ese sentido, el presidente de OSE destacó la importancia que el proyecto tiene para “quitarle fragilidad al abastecimiento de agua potable a todo el sistema metropolitano”, a pesar de que la Academia Nacional de Ciencias señaló que la iniciativa “vulnera la seguridad y la sostenibilidad hídrica”.
