El gobernador Maximiliano Pullaro presenció este jueves el inicio de un nuevo tramo de la obra de construcción del nuevo Puente Carretero que une las ciudades de Santa Fe y Santo Tomé. Se trata de la colocación de los pilotes, que son las bases verticales de hormigón que sostendrán el puente y que tendrán una profundidad superior a 25 metros. Esta instancia es considerada una etapa decisiva de la obra, cuya ejecución está a cargo de la Unión Transitoria de Empresas conformada por Pietroboni, Semisa y Cocivial S.A., con un presupuesto de $ 39.811 millones financiados íntegramente por el Gobierno de la Provincia. Del acto participaron el intendente de Santa Fe, Juan Pablo Poletti; su par de Santo Tomé, Miguel Weiss Ackerley; el senador Julio “Paco” Garibaldi, y demás autoridades provinciales y locales.
Tras la recorrida por el obrador, el mandatario enfatizó que “estamos haciendo obras históricas en toda la provincia, porque Santa Fe realmente puede”. Y agregó: “Nosotros no nos vamos a achicar cuando desde Buenos Aires nos dicen que no se puede o que no hay recursos. Estamos convencidos de que si administramos de manera eficiente los recursos, esta no es solo la provincia invencible, sino también la provincia imparable. Y lo estamos demostrando todos los días”. Luego recordó que “cuando hace un año y tres meses se había cortado el tránsito en el Puente Carretero -por desinversión del Gobierno Nacional-, los santotomesinos y santafesinos tenían que dar una vuelta inmensa. Justo en esos días nos tocó presentar el Acuerdo Capital, y con el ministro Lisandro Enrico decidimos, cueste lo que cueste, hacer este puente. Y aquí estamos, haciendo esta obra trascendente para la provincia”. Finalmente, Pullaro remarcó: “Quienes estamos gobernando hoy la provincia y las municipalidades de Santa Fe y Santo Tomé somos un equipo de gente que cree que puede llevar adelante las cosas con mucho esfuerzo, trabajo y dedicación. Y estamos convencidos de que podemos transformar la realidad. Y lo estamos mostrando”.
Los pilotes
Se instalarán un total de 136 pilotes. Son estructuras de hormigón armado de 33 metros de profundidad y un metro de diámetro, que se ubicarán en el lecho del río desde la cabecera de la ciudad de Santa Fe hacia Santo Tomé. En cada cabecera se colocarán cinco pilotes, mientras que los 126 restantes se distribuirán en 42 filas de tres pilotes cada una.
Afirmación de la santafesinidad
El ministro de Obras Públicas, Lisandro Enrico, sostuvo que “con la colocación de los pilotes se está trabajando a 30 metros de profundidad, en las raíces de este puente que desde 1939 dio muchísimo servicio y lo va a seguir dando”. Sin embargo, recordó que “es un puente nacional y, ante el olvido de la Nación, Santa Fe tomó la decisión de construir un puente provincial propio, rompiendo esos mitos de que hay que esperar a que venga Vialidad Nacional, de que no se puede, de que es muy largo o de la excusa del río”.Por su parte, el director provincial de Vialidad, Pablo Seghezzo, repasó los detalles técnicos y señaló que los trabajos comenzaron “hace poco más de tres meses. Se hizo todo el estudio de suelos para determinar a qué profundidad trabajar en cada punto donde se colocarán los pilotes; realizamos la evaluación de impacto ambiental, que ya está aprobada; y ejecutamos todo el movimiento de suelos necesario para poder trabajar”.
El nuevo puente
El nuevo viaducto tendrá 1.324 metros de longitud y se construye al sur y en paralelo al actual puente, que quedará destinado al ingreso hacia Santo Tomé. Facilitará el cruce hacia la ciudad de Santa Fe y contará, al igual que el existente, con dos carriles. La obra se desarrolla en cuatro frentes: dos en el lecho del río y su valle de inundación, y otros dos en las cabeceras de cada ciudad, que comenzarán una vez que los dos primeros estén avanzados. Los trabajos incluyen la renovación de las cabeceras en ambas ciudades, con nuevas calzadas de 9,30 metros, bicisendas, iluminación LED y parquización. En Santa Fe se demolerá el pavimento actual y se construirán dos calzadas nuevas, cada una con carriles de 3,65 metros y banquinas de 2 metros. En Santo Tomé se ejecutará una readecuación vial, que prevé el reordenamiento integral de avenida 7 de Marzo -desde Maciá hasta el río-, con modificaciones en los sentidos de circulación de las calles Mitre y Candioti, además de la incorporación de carriles exclusivos para bicicletas y sendas peatonales.