Las hijas de Diego Maradona pidieron medidas urgentes contra la magistrada destituida por filmar en secreto un documental sobre la muerte del ídolo. La acusan de hostigar testigos, manipular pruebas y poner en riesgo el proceso penal.
Dalma y Gianinna Maradona solicitaron formalmente la detención de Julieta Makintach, la jueza de San Isidro destituida esta semana por haber grabado de manera clandestina un documental sobre la muerte de Diego Armando Maradona mientras avanzaba el juicio. El pedido fue presentado por sus abogados, Fernando Burlando y Fabián Améndola, ante el Juzgado de Garantías que interviene en la causa penal.
En el escrito, los representantes legales de las hijas del Diez acusaron a la exmagistrada de “perturbar testigos, intimidar y manipular pruebas”, una conducta que —según remarcaron— genera “riesgos procesales extremos” y compromete la reconstrucción de los hechos y los derechos de las víctimas.
Los abogados detallaron que Makintach habría desplegado un “patrón inequívoco y reiterado” de hostigamiento hacia testigos clave. Entre los episodios citados mencionaron mensajes intimidatorios enviados a la policía Malen Tattí Romero tras su declaración y un intento de influir en el testimonio de la médica María Eva Soledad Pereyra. También incorporaron un cruce con la periodista Bárbara Villar durante el Jury de enjuiciamiento, cuando la exfuncionaria, molesta por su testimonio, la increpó en los pasillos del Senado bonaerense diciéndole: “Me destrozaste”.
“Estos actos no son aislados, sino parte de una conducta sistemática orientada a manipular, condicionar y amedrentar a quienes aportan prueba esencial”, remarcaron.
Además de la detención, Burlando y Améndola solicitaron medidas alternativas en caso de que el Juzgado no acceda al pedido: prohibición de salida del país, entrega del pasaporte, restricción de contacto con testigos, funcionarios, policías y periodistas vinculados al expediente, y preservación del material audiovisual del programa de Nelson Castro en el que Makintach habló públicamente sobre la causa. También reclamaron que se le impida brindar declaraciones o entrevistas sobre el proceso para evitar una “revictimización” de Dalma y Gianinna.
Las hermanas sostuvieron que la exjueza “habilitó y participó en un proyecto audiovisual clandestino” que expuso a las víctimas y que, incluso después de ser apartada, mantiene una “actitud hostil” y continúa opinando públicamente sobre el futuro juicio. Por eso pidieron una intervención urgente de la Justicia para proteger la prueba, garantizar el debido proceso y evitar nuevos perjuicios.
La postura de la acusación tras el pedido
Luego del planteo realizado por los abogados de las hijas de Maradona, el letrado Rodolfo Baqué —uno de los impulsores del jury de destitución— se manifestó en contra de la detención de Makintach. Aseguró que la imputada “debe transitar el proceso en libertad” y que “tiene derecho a hablar donde quiera”.
También rechazó que se incorpore como prueba el programa televisivo de Nelson Castro, al señalar que “lo único que vale es lo que diga en la declaración indagatoria”. Baqué, además, representa a Gisela Madrid, una de las imputadas por la muerte del exfutbolista.
La causa penal contra Makintach tramita en la Unidad Funcional de Instrucción Nº 1 de San Isidro. Está imputada por los delitos de “cohecho pasivo, violación de los deberes de funcionario público, abuso de autoridad, malversación de caudales públicos y peculado de servicios”.
