Home Policiales Barrio Nueva Esperanza: Un policía baleó a su pareja, golpeó a su...

Barrio Nueva Esperanza: Un policía baleó a su pareja, golpeó a su hija, se atrincheró y se tiroteó con colegas

La mujer fue internada con cuatro heridas de bala. La hija fue asistida en estado de shock. El agresor fue reducido y detenido.

Una situación cargada de tensión y dramatismo se vivió durante la mañana de este viernes en Nueva Esperanza de la ciudad de Santa Fe, cuando un oficial de policía se atrincheró en su vivienda tras dispararle a su pareja y retener a su hija de 16 años. El hecho ocurrió en una casa de calle Europa al 8700, casi en la esquina con Pasaje Aguirre.

Todo comenzó minutos antes de las 6.50, cuando una llamada al 911 —realizada desde un celular con geolocalización activada— alertó sobre gritos de mujeres, desorden dentro de la vivienda y la urgente necesidad de una ambulancia. Aunque la comunicación se cortó, fue suficiente para que los móviles policiales llegaran al lugar.

Cuando los primeros uniformados llegaron, se toparon con una escena desgarradora. Una mujer de 54 años había recibido cuatro disparos de arma de fuego (miembro superior izquierdo, miembro inferior derecho, en tórax y abdomen) y una adolescente, hija del atacante, presentaba golpes en la cabeza y un cuadro de shock emocional. Ambas fueron rescatadas del interior de la vivienda por los propios vecinos, que sin dudar socorrieron a las víctimas y las trasladaron por sus propios medios al hospital Iturraspe.

La mujer baleada fue ingresada de urgencia con herida de bala en zona de tórax con salida en zona lumbar y permanece internada. La adolescente fue atendida por médicos y contenida por profesionales de salud mental.

El agresor: un policía armado y fuera de sí

El atacante fue identificado como C.M., de 50 años, efectivo en actividad perteneciente a la comisaría 16 de Recreo. Según las primeras actuaciones policiales, el hombre utilizó su arma reglamentaria para efectuar los disparos, en el marco de un episodio de violencia de género.

Tras el ataque, el policía se atrincheró dentro de su vivienda con el arma en la mano, y luego salió a la vereda, donde permaneció sentado, visiblemente alterado y con claras intenciones de quitarse la vida. Fue en ese contexto que se solicitó la inmediata presencia del Grupo de Operaciones Especiales (GOE) y la conformación de un comité de crisis. El momento más crítico se produjo cuando, en medio de la negociación, se produjo un intercambio de disparos entre el personal policial y el hombre atrincherado. Fueron entre 10 y 12 detonaciones las que se produjeron, aseguran los testigos.

La tensión escaló al máximo y se temió lo peor. Por fortuna, no se registraron heridos en el tiroteo, pero el hecho puso en riesgo a todos los presentes y elevó la preocupación en la zona, que ya estaba totalmente acordonada. Los mediadores del GOE continuaron su labor bajo condiciones extremas, mientras el resto del personal desplegaba medidas de contención y seguridad en las inmediaciones del lugar.

Violencia de género y protocolo en marcha

Las autoridades judiciales confirmaron que el hecho se investiga bajo la carátula de «Tentativa de femicidio en contexto de violencia de género».

La hija del agresor declaró ante personal policial que su padre ya había tenido episodios de violencia previos y que en esta oportunidad, además de golpearla a ella, disparó contra su madre con intención de matarla.

El comité de crisis armado para este tipo de hechos de altísimo riesgo se mantuvo activo hasta entrada la mañana. Intervinieron personal del GOE, superiores de agrupación, personal médico, negociadores y especialistas en salud mental.

Tras varias horas de tensión, y ante la negativa del atacante a entregarse, personal del GOE irrumpió en la vivienda. Se escucharon dos o tres detonaciones y gritos provenientes del interior. El agresor efectuó un disparo que impactó en el escudo balístico del personal. Minutos después, la situación fue controlada.

C.M. fue reducido y salió herido en una pierna. Se presume que fue por una bala de goma. Fue inmovilizado por los agentes especiales, colocado en una camilla y trasladado en ambulancia al hospital José María Cullen, donde quedó internado bajo custodia.

La Fiscalía ya se encuentra actuando en la causa, que fue caratulada como tentativa de femicidio, lesiones agravadas y abuso de arma de fuego. La investigación continúa y no se descartan nuevas imputaciones.

Con información de El Litoral

Salir de la versión móvil