Hace rato que el conurbano bonaerense es "tierra de nadie" y se asemeja, por la creciente y cada vez más violenta ola de inseguridad, al gran Rosario tomado por el narcotráfico. Pero el brutal crimen de Morena, la nena de 11 años asesinada por motochorros cuando iba caminando al colegio en Lanús, terminó por desnudar, a horas del cierre de campaña electoral de cara a las PASO del próximo domingo, la incapacidad de la política para garantizar el derecho más elemental, a la vida de una niña.
Conmoción en Lanús por el crimen de Morena. Vecinos piden justicia. (Foto: Telam)
El asesinato de Morena marcó así un punto de inflexión en el escenario político electoral, no solo en ese municipio del sur del conurbano donde la pobreza es una realidad creciente, sino en la campaña nacional, porque Buenos Aires es la provincia con mayor caudal de votos, y donde se define cualquier elección nacional.
Los primeros en suspender los actos de cierre fueron los precandidatos de la opositora Juntos por el Cambio, para la gobernación: uno de ellos, le tocó de cerca, porque es el actual intendente de Lanús, Néstor Grindetti, y el otro, Diego Santilli, ex titular de seguridad de la Ciudad de Buenos Aires. Los siguieron sus respectivos candidatos presidenciales: Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta.
Más tarde, conmocionado por la noticia del asesinato de Morena, el gobernador y candidato a la reelección, Axel Kicillof, ordenó una reunión de emergencia y mandó a su ministro de Seguridad, Sergio Berni, a la comisaría para seguir la situación de cerca.
Los jefes de campaña de Unión por la Patria se reunieron en la sede del comando electoral nacional cerca de las 4 de la tarde. Anunciaron que se suspendían primero el acto de cierre de campaña que tenía prevista esa misma tarde de miércoles en Merlo, y más tarde, el acto de cierre nacional previsto para este jueves en el Teatro Argentino de La Plata.
La reacción del Gobierno ante la crisis de inseguridad
Cerca del campamento electoral del precandidato a presidente, Sergio Massa, admitían a A24.com que evaluaban la situación "minuto a minuto" mientras analizaban como seguir en las últimas horas antes de la veda.
Finalmente, pasadas las 16 Unión por la Patria emitió un comunicado oficial difundido en redes sociales con el texto: "Ante el doloroso crimen de Morena ocurrido esta mañana en Lanús, Unión por la Patria decidió suspender el acto de cierre de campaña previsto para mañana en el Teatro Argentino de La Plata. Acompañamos a sus familiares y pedimos justicia.
La protesta de vecinos reclamando justicia frente a la comisaría quinta de Lanús, se multiplicó por las pantallas de televisión con el reclamo por la impunidad con que se manejan los delincuentes, que "entran por una puerta y la justicia los suelta a las pocas horas" y con críticas a políticos y jueces que miran para otro lado.
Si bien Lanús es un municipio gobernado por Juntos por el Cambio, el problema de la inseguridad tomó en los últimos meses vuelo nacional, al imponerse en las encuestas como el segundo problema irresuelto más grave, después de la inflación.
Ante la crisis, los candidatos de la oposición como Patricia Bullrich -que tiene a la inseguridad como uno de sus caballitos de batalla electoral- salió a acusar al gobierno por la crisis.
Desde el campamento massista mantuvieron un hermético silencio. El ministro de Economía tiene como estrategia mostrarse como el presidente que defenderá los derechos de los trabajadores ante las propuestas neoliberales de Juntos y del libertario Javier Milei.
Pero recientemente Massa también se hizo eco del reclamo de inseguridad en un acto junto a Kicillof al entregar 40 patrulleros en Lomas de Zamora y esta semana al cerrar la gira federal en Rosario. En ese clima de tensión, en el comando nacional de campaña de Unión por la Patria debatían "minuto a minuto" como seguir.
Con Massa de campaña en Mar del Plata, cerrando recorridas en fábricas y con empresarios Pymes, en medio de la conmoción se terminó suspendiendo la realización del acto de cierre para el que ya estaba todo listo este jueves en un escenario con fuerte simbología kirchnerista: el Teatro Argentino de La Plata, que no iba a ser un acto del peronismo tradicional, o como un show al estilo de Cristina, sino una especie de "conversatorio" del candidato escuchando pedidos de personas comunes, sobre distintos temas.
Todo quedó supeditado a la conmoción desatada en el conurbano profundo, donde Massa no alcanzó a hacer pie, pero que pensaba hablar esa misma tarde, junto a Kicillof en Merlo, de su "modelo de seguridad" aplicado cuando fue intendente de Tigre, y al que días atrás en Rosario, prometió llevar si llega a ser presidente, a todo el país.
Fuente: A24
