El Gobierno presentó un nuevo proyecto de reforma laboral que propone la creación del Fondo de Asistencia Laboral (FAL), un esquema obligatorio en el que las empresas aportarán un 3% de su masa salarial para cubrir futuros despidos, sin modificar el monto que reciben los trabajadores.
El FAL funcionará como un respaldo previo al pago de indemnizaciones, administrado por cada empleador a nombre de la cuenta de la empresa. Los trabajadores continuarán recibiendo la indemnización correspondiente, calculada en un mes de sueldo por cada año de servicio o fracción mayor de tres meses, tomando como referencia la mejor remuneración mensual habitual del último año.
El proyecto mantiene los pagos actuales de cargas patronales: las empresas dejarán de abonar el 3% destinado a otras contribuciones a cambio de destinarlo al FAL. Esta iniciativa reemplaza parcialmente al Fondo de Cese Laboral aprobado en la Ley Bases, que nunca se implementó de manera generalizada.
Además, la reforma contempla modificaciones en convenios colectivos, limitaciones a la ultraactividad, cambios en el derecho a huelga, la implementación de un banco de horas, remuneraciones por mérito y beneficios fiscales para nuevas contrataciones. El Gobierno enviará el proyecto al Congreso durante esta semana para su tratamiento en sesiones extraordinarias.
