Los gobernadores de Córdoba, Martín Llaryora; de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, y de Entre Ríos, Rogelio Frigerio, criticaron este sábado el aumento a las retenciones a la soja, el maíz, el girasol y el sorgo que oficializó el Gobierno el viernes, al considerar que la medida «asfixia al campo en un momento crítico». El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, consideró entendible el reclamo de los mandatarios provinciales, pero señaló que «es irrazonable que no entiendan que el gasto y el equilibrio fiscal se mantienen con muchos impuestos que no fueron creados» por la administración de Javier Milei.
«La medida anunciada por el Ejecutivo nacional asfixia al agro en un momento crítico. Por eso, desde el corazón productivo del país, ratificamos nuestro compromiso con el campo y vamos a seguir trabajando hasta que las malditas retenciones sean definitivamente eliminadas», indicó el mandatario cordobés a través de X.
A su vez, señaló que el país necesita medidas «que acompañen a quienes producen, invierten y generan puestos de trabajo», e indicó que la normativa va a provocar «un nuevo freno al campo». «Reiteramos nuestro rechazo a esta medida que vuelve a golpear al interior productivo y al sector más dinámico de la economía», aseguró.
Por su parte, el gobernador santafesino, que pertenece a la Unión Cívica Radical (UCR), calificó la nueva normativa como un «error» y pidió no solo que se respete la tendencia a la baja en el esquema de retenciones, sino que sean eliminadas.
«Es no mirar al interior productivo de la República Argentina. Todo lo que se genera en el campo debe quedar en los pueblos y en las ciudades del campo fundamentalmente. Los gringos, los trabajadores, no se llevan la plata al exterior, no la ponen en cuentas offshore, no la ponen en criptomonedas», aseveró Pullaro.
«Entre Ríos es el campo, por eso estamos siempre al lado de los productores y vamos a seguir estándolo con hechos concretos, como la reducción de la presión impositiva y el acompañamiento permanente para que Nación empiece a bajar las retenciones hasta su eliminación», indicó, por otro lado, Frigerio.
La medida se hizo oficial el viernes y era resistida en la previa por los diferentes gobernadores y por las entidades que representan al campo. A partir del 1° de julio, el trigo y la cebada continuarán con el esquema reducido del 9,5%, mientras que los productores de soja pasarán de pagar 26% a 33% y los de maíz y sorgo, de 9,5% a 12%. En tanto, las retenciones del girasol subirán de 5,5% a 7%.
«Siempre escuchamos el reclamo de los productores. Entendemos que gobernadores que lideran provincias agropecuarias puedan subirse a ese reclamo, nos parece razonable. Pero también es irrazonable que no entiendan que el gasto y el equilibrio fiscal se mantiene con muchos impuestos que no fueron creados por nosotros, que hemos bajado muchos impuestos», opinó el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, en una entrevista concedida este sábado a Radio Mitre.
El funcionario advirtió que la idea del Gobierno a futuro es «conseguir un equilibrio a través de la eliminación del gasto» y contó que en la Casa Rosada están «viendo cómo se diseña el sistema tributario que no afecte la producción».
Fuente: El Canciller