Luego de una serie de derrotas para el oficialismo en el Senado, el Gobierno decidió demorar los vetos -que Javier Milei prometió que aplicaría al aumento de las jubilaciones, la prórroga de la moratoria previsional y la emergencia en discapacidad- para dialogar con los gobernadores. En tanto, la oposición presiona en Diputados para convertir en ley la distribución automática de los Aportes del Tesoro Nacional (ATN) y la coparticipación del Impuesto a los Combustibles Líquidos.

En el primer caso, el Poder Ejecutivo buscará retomar el lazo con los mandatarios provinciales dialoguistas este jueves durante la exposición anual de la Sociedad Rural Argentina, mientras retrasa la puesta en marcha de la herramienta que lo habilita a impedir la promulgación de las iniciativas ya sancionadas.

Para hacerlo, el líder de La Libertad Avanza tiene 10 días hábiles a partir de la comunicación formal del Congreso, algo que todavía no ocurrió. Según trascendió, lo haría este miércoles, por lo que el Presidente podría aplazar su decisión hasta el 30 de julio.

Durante ese tiempo de aire, el Gobierno emprenderá su camino de recomposición del vínculo con sus otrora aliados, comenzando por la cita de esta semana en La Rural, en el barrio porteño de Palermo. Allí asistirá el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, quien fue convocado a las 19.

Su objetivo es establecer un primer contacto con los gobernadores tras la sanción de las leyes previsionales y la emergencia de discapacidad, además de la aprobación del proyecto que aumenta la coparticipación del impuesto a los combustibles y del que afecta el envío de ATN a las arcas provinciales, los cuales deben ser girados a la Cámara baja.

Asimismo, en la Casa Rosada planean convocar a una reunión formal para intentar sostener el apoyo de 86 diputados que permita respaldar los vetos que Milei prometió. En paralelo, el Ejecutivo deberá lidiar con la oposición más férrea, ya que el kirchnerismo buscará capitalizar los últimos triunfos para forzar el tratamiento de iniciativas pendientes.

Por su parte, los gobernadores presionan en Diputados para convertir en ley las propuestas que otorgan más fondos a sus distritos. Mientras se espera que el oficialismo dilate su tratamiento, los referentes antagonistas evalúan convocar una sesión para el 30 de julio.

En ella, tratarían de avanzar con el proyecto de financiamiento universitario y la declaración de emergencia en el Hospital Garrahan, lo que obligaría a emplazar al presidente de la comisión de Presupuesto, José Luis Espert, y habilitaría el tratamiento en comisión de las iniciativas que ya obtuvieron la luz verde del Senado.

Sin embargo, primero deben ser giradas por su titular, Victoria Villarruel, en medio de un debate reglamentario sobre la validez de la sesión en la que se aprobaron. A la espera de ese momento, desde Unión por la Patria pretenden avanzar en las negociaciones con el resto de los bloques.

La meta es construir las mayorías que le permitan dar el visto bueno con dos tercios. Con ese número, la oposición podría blindar los proyectos ante un futuro veto de Milei, a quien le basta un tercio de una de las dos cámaras para ratificar su decisión y bloquear la ratificación de las propuestas.