El presidente encabezó este miércoles por la mañana una reunión ampliada de Gabinete en la Casa Rosada con el objetivo de avanzar en la estrategia legislativa rumbo al tratamiento del Presupuesto 2026 durante el período de sesiones extraordinarias. El encuentro fue liderado por el flamante jefe de Gabinete, Manuel Adorni, y marcó el inicio formal de una nueva etapa en la dinámica interna del Ejecutivo nacional.
La reunión comenzó a las 9.30 y se extendió hasta minutos antes de las 11 en el Salón Eva Perón de la Casa Rosada. El temario incluyó ocho puntos centrales, entre ellos el seguimiento de gestión de cada ministerio, la coordinación interministerial, la agenda de reformas estructurales y la estrategia para sumar respaldo político al proyecto de Presupuesto 2026 en el Congreso.
El ministro coordinador abrió el intercambio con una exposición detallada sobre los resultados de las reuniones individuales que mantuvo previamente con los titulares de las nueve carteras nacionales. En ese marco, presentó un diagnóstico de las principales urgencias de cada área y fijó los lineamientos de trabajo para los próximos dos meses, con metas concretas y seguimiento periódico.
Adorni informó además que se habilitarán nuevos espacios de diálogo entre los ministerios con equipos de seguimiento de gestión que reportarán directamente a Jefatura de Gabinete. Según se explicó desde su entorno, las reuniones de coordinación se realizarán cada diez días, algunas de ellas incluso sin la presencia del Presidente, para aceitos los mecanismos de control interno y planificación.
Cada cartera deberá designar a un interlocutor responsable que actuará como nexo permanente con el equipo de seguimiento que se encuentra en plena conformación. La intención es ordenar la ejecución de políticas públicas en función de una hoja de ruta común, con objetivos medibles y plazos definidos, según se dejó trascender tras el encuentro.
Durante el intercambio, el mandatario expuso durante casi una hora sobre la necesidad de aprobar lo que denominó las “reformas de segunda generación”, en la antesala de una nueva reunión del Consejo de Mayo. En ese contexto, dio la bienvenida formal a los dos nuevos integrantes que se incorporarán al esquema de seguridad y defensa en los próximos meses.
La mesa estuvo integrada por los nueve ministros que participaron de la ronda de consultas previas encabezadas por el jefe de Gabinete. También estuvieron presentes funcionarios de primera línea del Ejecutivo, lo que dio al encuentro un carácter político y administrativo de alto nivel, en un momento clave para la definición del rumbo legislativo.
El temario incluyó además el debate por las estrategias que deberá intensificar el Poder Ejecutivo para sumar adhesiones de las provincias y de los bloques aliados al Presupuesto 2026. En ese punto, se analizó la situación de las negociaciones con gobernadores y el clima político en el Congreso de cara a las sesiones extraordinarias.
Otro de los ejes abordados fue la reforma laboral que elaboran los equipos técnicos en coordinación con Federico Sturzenegger, actual ministro de Desregulación y Transformación del Estado. El paquete de cambios forma parte del núcleo duro de transformaciones impulsadas por el Gobierno para el próximo período parlamentario.

El Presidente llegó a la Casa Rosada minutos antes de las 9 y fue recibido por los ministros que aguardaban en el Salón Eva Perón. Entre los primeros en ingresar estuvieron Sturzenegger y el ministro del Interior, Diego Santilli, seguidos por el resto de los integrantes del Gabinete.
El encuentro contó con dos invitados especiales: el jefe del Estado Mayor General del Ejército, Carlos Presti, y Alejandra Monteoliva, quien será parte del recambio en el área de Seguridad. Ambos fueron presentados formalmente ante el resto de los funcionarios como futuras incorporaciones al equipo.
También participaron la secretaria de Legal y Técnica, María Ibarzabal Murphy, y la secretaria General de la Presidencia, Karina Milei. Se sumaron además el asesor presidencial Santiago Caputo y el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem.
Desde el área de comunicación de Presidencia se difundió un video del momento en el que el mandatario ingresó al salón y saludó a cada uno de los funcionarios. Las imágenes mostraron un clima distendido, con abrazos efusivos especialmente con Petri, Santilli y Bullrich, una postal recurrente de la actual administración.
Los abrazos de Milei con sus ministros
En la grabación difundida por Presidencia, el mandatario ingresó al Salón Eva Perón al ritmo de una canción de la banda argentina La Beriso. Saludó en primer lugar al presidente del Banco Central, Santiago Bausili, y luego al ministro de Economía, Caputo, ubicados en uno de los extremos de la mesa.
Luego avanzó saludando al ministro de Salud, Lugones; al titular de Justicia, Cúneo Libarona; a Sturzenegger y al canciller Quirno. En uno de los momentos más llamativos del video, corrió hasta donde se encontraba Santilli para fundirse en un abrazo, repitiendo luego el mismo gesto con Petri, con saltos y expresiones de euforia.
El saludo a Adorni también fue efusivo, con palmadas en la espalda y una breve charla previa al inicio formal de la reunión. Lo mismo ocurrió con Bullrich, en un gesto que buscó mostrar respaldo político en medio de los cambios que se preparan en el área de Seguridad. Al cierre, abrazó a Santiago Caputo y a Martín Menem.
Presupuesto 2026, Consejo de Mayo y reformas estructurales
La reunión se desarrolló en paralelo al último encuentro del Consejo de Mayo previo al 15 de diciembre, fecha establecida para la presentación del documento que deberá materializar los diez puntos del Pacto de Mayo en proyectos de ley concretos. Ese material servirá como base para el envío de iniciativas al Congreso en extraordinarias.
Según trascendió de fuentes cercanas al proceso, el documento podría no incluir finalmente la rediscusión del sistema de coparticipación federal, un reclamo central de varias provincias. Tampoco habría avances por ahora en materia de reforma previsional, a pesar de que ambos temas integran puntos sensibles del acuerdo firmado en Tucumán.

En la mesa de Gabinete se analizó además la factibilidad política de avanzar con estos temas en un Congreso fragmentado. El Gobierno busca sostener la aprobación del Presupuesto 2026 como eje ordenador de toda su agenda legislativa, entendiendo que se trata de una herramienta clave para consolidar su programa económico.
También se evaluó la posibilidad de incorporar en el temario de extraordinarias la reforma del Código Penal, además de los cambios laborales ya en elaboración. Por ahora, fuentes oficiales señalan que el paquete definitivo aún no está cerrado y dependerá del grado de consenso que logre articular el oficialismo con los bloques aliados.
Desde el entorno del nuevo jefe de Gabinete señalaron que el encuentro se desarrolló en un “muy buen clima” y que el Presidente mostró disposición a escuchar los informes de cada área. La apuesta de Adorni es imprimir su propio estilo a la coordinación política de Balcarce 50, con mayor seguimiento y control.
En ese marco, no se descarta que en las próximas semanas se activen auditorías internas en algunos ministerios para evaluar el grado de cumplimiento de objetivos. La iniciativa apunta a fortalecer los dispositivos de control de gestión y a ordenar el funcionamiento de la administración en esta segunda etapa del mandato.
Mientras tanto, el Gobierno acelera definiciones mientras se acerca el verano y el Congreso se prepara para un período de intensa actividad legislativa. El Presupuesto 2026 aparece como la madre de todas las batallas parlamentarias, junto con las reformas estructurales que el Ejecutivo considera centrales para su programa político y económico.







