Hay dos imágenes que están disociadas por la lógica. El domingo, primer partido después de la eliminación de la Copa Libertadores a manos de Paranaense, en UNO los hinchas se rompieron las manos para aplaudir al Ruso Zielinski. Y hace unas horas nomás, el propio técnico presentó la renuncia "para descomprimir".
Algunos sostienen que dentro del club, al mismo tiempo que duraba la calentura por lo que se consideraba "un robo" de la Conmebol en el partido de vuelta -teoría sostenida por el propio Verón, que armó un escándalo e insultó a los jueces tras el partido-, también hubo críticas al juego del equipo, del cual no hay otro responsable que Zielinski. Y las críticas que se le hacen, tienen que ver con que el equipo perdió los rasgos de "rusismo" que lo caracterizaron en los primeros tiempos.
Esto es: dejó de ser un confiable defensivamente, no se destaca en la pelota parada, ya no es una formación corta y compacta que les hace la vida imposible a los rivales, no juega largo para el 9 para agarrar la segunda pelota… No aparecen los rasgos de los equipos de Zielinski con los que rápidamente se identificó el hincha, que por ejemplo no tuvo el mismo feeling con tipos como Gaby Milito, ni siquiera cuando el equipo jugaba bien. Zielinski está señalado como parte de la escuela del Pincha y Gaby no. Y eso, en la mitad rojiblanca de La Plata, tiene un peso decisivo.
La gente no olvida, además, y por eso aplaude, que el club la pasó muy mal con Desábato, que sufrió también el interinato de Quattrocchi y que el Ruso enderezó el barco hasta alejarlo de las aguas agitadas del fondo de la tabla. Celebra también, el hincha, algunos resultados que no pueden obviarse: Estudiantes volvió a la Libertadores, ganó la primera fase caminando un par de fechas antes, llegó a cuartos de final y se despidió con una polémica grande.
En los clásicos de la ciudad, si bien no hubo victorias, tampoco hubo que lamentar derrotas, y eso prolonga la racha positiva. ¿El equipo ya no juega como antes? Es verdad. ¿Pierde con Argentinos desde los 10 minutos con un gol gestado en una pelota parada? También. ¿Está 20º en el torneo? Totalmente -pero estaba dedicado a la Copa. Y lo fundamental es que el objetivo, que es volver a meterse en la Copa, no está tan lejos. Siete puntos lo separan y hay más de 40 en juego.
Estudiantes no puede permitirse una salida del técnico en este momento, con el desbande que eso provocaría, una situación de inestabilidad que difícilmente pueda pilotear un interino. Ahora se vienen dos partidos seguidos en UNO, Unión y Patronato. Hacia allí apunta la dirigencia, a una recomposición que levante al equipo y le permita pelear hasta el final por ese sueño. ¿Qué pasará a fin de año, cuando se le venza el contrato al Ruso? Difícil de saber en este momento. El posteo de la Bruja con su amigo Hernán Crespo, lejos de aportar tranquilidad, dio lugar a un montón de interpretaciones. En definitiva, si no estaba asegurada hace una semana la continuidad del Ruso, da la sensación de que ahora será partido a partido…
